Quiero que comprendas el por qué de tantas cosas que se me olvida preguntarte si tú quieres saber el por qué de todo lo que yo te quiero contar. Porque, digo yo, que seguramente lo querrás vivir sin necesidad de que nadie te adelante inoportunamente los acontecimientos.
Me imagino que tu alma vacía todavía de heridas es incapaz de comprender todo lo que yo quiero contarle, todavía carece de los conocimientos básicos para descifrar esta lectura tan complicada que traigo a tu abrevadero; llena de garabatos y tachones; de aclaraciones a los costados y a los pies de cada página. Tan llena de enmiendas que ya casi no se la reconoce.
Pero todavía me quedan tus páginas, las que reservé para ti, blancas e impolutas como lo están todas las tuyas. Este viaje lo hacemos juntos y solo tú decidirás hasta cuando.
9 comentarios:
Lo delicado es que esas páginas blancas llevarán los títulos que vos y su madre sellarán con lacre.
Menuda responsabilidad y menudo orgullo el tuyo.
Felicidad.
Y ojalá hagáis todo el viaje juntos, porque merece la pena...
Besos
Esas páginas blancas son un lujo Coronel, lo que daría yo por borrar algún parrafillo de esos que, aún sin quererlo, nos vuelve desconfiados del mundo.
Lo cierto es P. tiene mucha suerte de que estés de Coronel de su ejército y de tener como protectora a esa ofidia que seguro sacaría todo su veneno para defenderla.
Pero Coronel, como tú bien dices, hay páginas que se tienen que escribir por uno mismo, no valen las memorias ajenas.
Besos a todos!!!
Mavi, no lo dudes.
La verdad es que es una responsabilidad que a veces pesa demasiado. Te puede asegurar que teniendo los padres que tiene, ella va a aprender a base de golpes y eso no se como lo voy a llevar yo.
Un beso a todos también.
En una época creí que las lecturas que ofrecíamos a quienes tenemos a cargo, no se verían bien llenas de anotaciones, enmiendas, garabatos, tal como describís las tuyas. Pero hoy yo también muestro mis páginas así, a puro ensayo-error, corrigiéndome, contradiciéndome, pero buscando todo el tiempo. No sé si nuestras páginas les sirvan para las suyas en blanco a ellos, pero al menos tendrán una idea de qué va la vida, no?
Qué suerte la de P., que aun conserva páginas en blanco...lo que daría yo por tener menos borrones en las mías....aaaaiiinsss, qué lunes de mierda!
Decía Javier cercas en La velocidad de la luz que las únicas historias que merecen la pena ser contadas son aquellas que no pueden contarse.
Ese es el filo de la vida, me temo.
Un saludo.
eso necesito
nuevas paginas blancas
un beso.
Les leo a todos ustedes y me pregunto cuando podrá mi querida P leerles también, porque quizás debiera ser ella la que respondiera desde su bendita inocencia dibujada en una sonrisa que a mí se me antoja perfecta.
Gracias a todos y besos y abrazos.
P.S Juro que sacaré tiempo para visitarlos a todos. No sé cuando pero lo haré... pongo a dios por testigo.
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